Editorial: Esencia
Nº de páginas: 528
Precio: 15´90€
Tomo: 1/?
Obligada por las circunstancias políticas y económicas, en la primavera de 1800 tuve que abandonar mi Francia natal y trasladarme a Inglaterra, donde pasé mi juventud como la parienta pobre, rodeada de normas y convencionalismos asfixiantes.
No sé si por suerte o por desgracia, a una temprana edad aprendí dos verdades que me ayudaron a sobreponerme a las adversidades y que me convirtieron en la mujer que ahora soy.
La primera fue darme cuenta de que para nosotras, la vida no era sino una partida de cartas en la que los hombres siempre llevan ventaja, por lo que tuve que aprender a jugar de farol.
La segunda fue llegar a la conclusión de que para mí sólo existía un camino: abrirme de piernas, ya fuera contrayendo un matrimonio aceptable o recibiendo unas míseras monedas, que disminuirían a medida que mi edad avanzase.
Tracé mis objetivos sin permitir que me afectasen los sentimientos. No me importó ser el blanco de críticas. Dejé que mis encantos femeninos encandilaran a cuantos se cruzaban en mi camino para que jamás se preocuparan por mi inteligencia. Y todo funcionó...
Hasta que cometí el peor de los errores...
Opinión personal:
Noe Casado se está convirtiendo en una de las autoras de la que más libros estoy leyendo. Me hice, si no me equivoco, con tres de sus libros a lo largo de este año y lo cierto es que ninguno estuvo a la altura de lo esperado. Son buenas historias, que atrapan, pero no consiguen dejar en mí esa huella imborrable que te hace recordarlas con el paso de los años.
El libro está ambientado en finales de 1800, con Ornela como protagonista, una chica que tiene que huir de su país debido al fallecimiento de su padre. Esta triste noticia, unido a los problemas legales en que había estado implicado su progenitor, dejan a la joven y a su madre en una situación de lo más complicada. Son dos mujeres desamparadas, sin la presencia de un hombre que pueda darle el status que solamente el género masculino podía proporcionarles en la época.
La madre de Ornela se ve obligada a poner la vida de ambas en manos de un malévolo pariente cercano y una de las dos saldrá peor parada que la otra. La chica se da cuenta de que, si quiere salvarse a ella misma y también a su madre, debe manipular a los hombres a su antojo. Y no solo eso, si no que, a medida que crece, Ornela siente la necesidad de vivir su sexualidad a tope, algo mal visto en la sociedad de la época, lo que la obligará a mantener la máxima discreción si desea salir indemne de todo eso.
Ornela busca un matrimonio que la vuelva a colocar en una buena posición social a la vez que le permite escapar de su marido y mantener diferentes escarceos con los hombres más diversos. Encontrará a la figura perfecta para ello en Stephan, un militar que pasa largas temporadas fuera de casa y que le permite a Ornela llevar la vida que siempre ha deseado pero, ¿será capaz Ornela de escapar de los encantos de Stephan o terminará sucumbiendo a ellos?
Ornela no me ha gustado demasiado como protagonista. Hay aspectos suyos que me parecen fabulosos, tales como su carácter liberal, su manera de enfrentar los problemas siempre desde el positivismo, su forma de imponer su propio criterio en una sociedad totalmente machista... Sin embargo, creo que en ocasiones es una chica muy egoísta y solamente piensa en ella. Si ya el personaje no me estaba convenciendo, el final del libro me dejó con la boca abierta ya que, a mi parecer, se comporta de forma rastrera y no me ha gustado absolutamente nada su brutal transformación.
Stephan es un personaje que me ha gustado bastante porque se va abriendo poco a poco y vamos descubriendo un personaje cada vez más apasionado y entregado. Aunque me ha gustado bastante, sí que es cierto que no goza de un carácter arrollador que te haga adorarlo en todo momento. No es un personaje que consiga atrapar al lector por completo y lo cierto es que me ha costado bastante entender muchas de sus reacciones.
Es una pena que el protagonista masculino no sea el mejor personaje del libro ya que hay otros que sí cuentan con esa garra de la que él carece, como puede ser Charles, el mejor amigo de Ornela y un hombre tierno y encantador que me hubiera gustado conocer mucho más a fondo y Austin, el primer amante de Ornela, otro chico con una personalidad de lo más atrayente que me habría encantado como protagonista.
Creo que la autora comete, una vez más, el error de llenar el libro de escenas de sexo que terminan cansando mucho y minando las ganas del lector de continuar con la historia. Son escenas que a mí me aburren sobremanera y creo que algunas son necesarias pero esta autora tiene la costumbre de sobrepasarse con ellas. Es cierto que estas no son tan numerosas como puede ser el caso de Quiero lo mismo que tú, en el cual buena parte del libro era sexo y solamente sexo pero, aún así, creo que reducir un poco este tipo de escenas no hubiera estado nada mal.
Sin duda, lo que me ha dejado de verdad con la boca abierta es el desenlace del libro. Doy por hecho que habrá segunda parte ya que el final deja varios cabos sueltos y no creo que sea el apropiado para este libro ya que nos permite ver el lado más mezquino de la protagonista y dos de los personajes con mayor peso de la historia no tienen el final merecido.
Por lo demás, no puedo decir que me haya parecido una mala historia. Simplemente quería destacar esos dos detalles porque son los aspectos que no me han permitido conectar del todo con el libro. Creo que carece de un ritmo un poco más vertiginoso pero, por lo demás, es una historia que, a pesar de su extensión, se deja leer bien y puede resultar una lectura de lo más entretenida.
En definitiva, No te pertenezco es un libro que no ha cubierto todas mis expectativas debido a una protagonista que no me ha convencido y un exceso de escenas de sexo que no me han permitido disfrutar de la historia todo lo que me habría gustado.
Gracias a la editorial por el envío del ejemplar.