Reseña Una buena chica- Mary Kubica

Autora: Mary Kubica
Editorial: HarperCollins
Nº de páginas: 368
Precio: 18´90€
Tomo: Autoconclusivo

Una noche, Mia Dennett entró en el bar donde había quedado en encontrarse con un amigo con el que salía de vez en cuando. Pero él no apareció, y Mia cometió la imprudencia de marcharse con un misterioso desconocido. Colin Thatcher parecía en principio un ligue inofensivo. Marcharse con él, sin embargo, acabaría siendo el peor error que había cometido en toda su vida.
Colin decidió llevarla por la fuerza a una cabaña aislada en las montañas de Minnesota en lugar de entregarla a las personas para las que trabajaba. A partir de ese instante, Eve -la madre de Mia- y el detective Gabe Hoffman no se detendrían ante nada para encontrarla. Nadie, sin embargo, podía predecir las implicaciones emocionales que tendría su secuestro y que acabarían por causar el derrumbe de la vida familiar de los Dennett.


Opinión personal: 
Es evidente que este no es el género que más suelo leer pero sí el que me gusta intercalar entre mis lecturas habituales de vez en cuando. Este libro me ha dejado muy claro que no debo renunciar a este tipo de lecturas porque, por norma general, suelo disfrutarlas mucho y me proporcionan momentos muy agradables.

Mia siempre ha sido una chica un tanto solitaria, impulsiva y confiada. El día en que Colin se presenta en su vida, ella necesita huir de todo y es por ello que le acompaña a su casa. Lo que la chica no sabe es que las intenciones del chico no son pasar un rato agradable con ella, si no secuestrarla.

Justo en el último momento se cambian las tornas y Colin decide huir con la chica en contra del mandato que había recibido. Mientras Mia permanece desaparecida, el caso da la vuelta al mundo y mientras el inspector Gabe se sitúa a la cabeza del caso, la madre de la chica se desvive porque su hija esté de regreso sana y salva pese a que la relación de ella con la familia no era la mejor del mundo.

Mia es un personaje que me ha fascinado. Posee muchísimas luces y sombras, siempre ha permanecido bajo el manto de su familia, una familia a la que ella nunca se ha sentido especialmente unida. Su relación con ellos es prácticamente nula y la soledad con la que siempre ha tenido que convivir han hecho de ella una persona con muchas carencias y que nunca ha terminado de encontrar su lugar en el mundo. Ha sido fascinante descubrir este personaje porque goza de un lado humano espectacular, de una vulnerabilidad que hacen imposible no sentir una empatía asombrosa hacia ella.
Colin es otro personaje que me ha fascinado. Él es el captor de la chica, un hombre que ha tenido que aprender a enfrentarse a la crudeza de la vida desde muy joven y que no tiene demasiados escrúpulos. Os aseguro que este chico no os dejará indiferentes porque es apasionante ir descubriendo su vida y los motivos que le han llevado a ser cómo es. Pese a ser el villano de la historia desde el inicio, os aseguro que os apasionará como personaje.

El libro cuenta con tres voces narrativas y la autora juega con los saltos en el tiempo. Esas tres voces pertenecerán a Gabe, el inspector que lleva el caso y en el que se implica mucho emocionalmente; a Eve, la madre de Mia, que será la que nos acercará su testimonio acerca de su relación con su hija y Colin, el hombre que secuestrará a Mia y que será quién nos haga partícipes de los motivos que le han llevado a raptar a la chica.

Me ha parecido un acierto total y absoluto el empleo de esas tres voces narrativas. Aunque ni Gabe ni Eve serán los personajes centrales de la historia, sí serán claves en la misma, unos en relación con el pasado de la chica y otros en relación con su presente y futuro. La voz de Colin nos narra el momento del secuestro, los días que permanece con la chica. En cambio, la de Eve nos acercará al pasado de la chica y nos hará adentrarnos en su lado más íntimo y personal. La voz de Gabe será la encargada de informarnos de los avances de la investigación pero, pese a su implicación en el caso, como es lógico, su narración será bastante más fría y distante.

Pese a ser la protagonista, Mia es la única que no tiene voz en la historia. La conoceremos a través de los relatos de los demás pero, sin embargo, es un personaje al que he podido sentir muy cercano porque serán precisamente las voces narrativas del libro las que nos permitan conocerla en todas sus vertientes.

Tengo que decir que me ha encantado la pluma de la autora. Dota a los personajes de una sensibilidad sin igual y tiene la habilidad de penetrar en los sentimientos de los personajes. Es un libro duro, cuya historia no resulta fácil de leer pero, pese a ello, consigue conectar con el lector debido a su tacto a la hora de desarrollar la trama y de hacernos partícipes de una historia tan cruda que saca lo mejor y lo peor de cada personaje.

No os diré que el libro engancha desde la primera página porque a mí ya me ha bastado la sinopsis para necesitar devorarlo en dos segundos. La historia goza de un ritmo trepidante, suceden cosas a cada instante y, aunque algún detalle resulta bastante predecible desde el principio, lo cierto es que pega unos giros inesperados que nos dejan con la boca totalmente abierta.

El desenlace... qué deciros del desenlace. Me ha mantenido en vilo a lo largo de todas las páginas y lo cierto es que ese final me ha dejado con el corazón encogido. No es algo que me esperase. Era muy sencillo para la autora tomar el camino fácil y obsequiarnos con el desenlace que todos estábamos esperando. Sin embargo, Mary Kubica consigue sorprendernos una vez más y nos ofrece un desenlace que, pese al estupor inicial, creo que es un final muy digno para el libro y, pese a que no pueda satisfacer a todos, adecuado.

En definitiva, Una buena chica es un libro que me ha fascinado, con unos personajes con muchas luces y sombras y un ritmo trepidante que os dejará sobrecogidos y os impedirá separaros de sus páginas. Totalmente recomendable.

Gracias a la editorial por el envío del ejemplar.