Reseña Mujeres que compran flores- Vanessa Montfort

Autora: Vanessa Montfort
Editorial: Debolsillo
Nº de páginas: 448
Precio: 9´95€
Tomo: Autoconclusivo

En un pequeño y céntrico barrio de la ciudad hay cinco mujeres que compran flores. Al principio ninguna lo hace para sí misma: una las compra para su amor secreto, otra para su despacho, la tercera para pintarlas, otra para sus clientas, la última... para un muerto. La última soy yo y ésta es mi historia.
Después de la pérdida de su pareja, Marina se da cuenta de que está totalmente perdida: había ocupado el asiento del copiloto durante demasiado tiempo. Buscando empezar de cero acepta un trabajo provisional en una curiosa floristería llamada El Jardín del Ángel. Allí conocerá a otras mujeres muy diferentes entre sí, pero que, como ella, se encuentran en una encrucijada vital con respecto a su trabajo, sus amantes, sus deseos o su familia. De la relación entre ellas y Olivia, la excéntrica y sabia dueña del local, surgirá una estrecha amistad de la que dependerá el nuevo rumbo que tomarán sus vidas.

Opinión personal:
Este es un libro muy especial para mí porque me lo regaló mi padre sin habérselo pedido así que es uno de esos recuerdos que se quedarán para siempre guardados en mi corazoncito. Hace unas semanas que lo tenía en casa y decidí leerlo ya porque además también quería leerlo mi hermana, así que así ya se lo puede llevar y leerlo con toda la tranquilidad del mundo.

En él conoceremos a Marina en un momento clave de su vida. Ha perdido a su marido Óscar, quién era claramente el motor de su vida. Ahora no sabe por dónde tirar, no sabe cómo salir hacia adelante porque todo le recuerda a él y estaba tan acostumbrada a tomar decisiones en función de él que ya no sabe cómo enfrentarse a la vida en soledad.

Cuando por fin decide empezar a explorar su nuevo futuro, se encontrará ante la floristería El Jardín del Ángel. Sin esperarlo, de un momento a otro empezará a trabajar allí y eso le dará la oportunidad de conocer a varias mujeres asombrosas que también se encuentran en momentos clave de su vida.

Victoria, Aurora, Casandra y Gala, así como Olivia, la sabia propietaria de la floristería. Cada una de ellas presenta una problemática distinta y, por una razón u otra, se encuentran perdidas ante la vida y con multitud de dudas sobre su futuro. Las experiencia de cada una de ellas le servirán a Marina para comenzar un aprendizaje que le hará replantearse no solo su presente y su futuro, sino también su pasado.

Marina es una protagonista que me ha gustado bastante aunque he tenido la sensación de que me ha costado bastante penetrar en ella. En un principio no la comprendía demasiado, y tenía la sensación de que se dejaba llevar demasiado por las demás, pero lo cierto es que me ha encantado su proceso de autodescubrimiento y el camino que recorreremos con ella es espectacular. Es una mujer muy dolida, muy perdida, pero aún así no pierde la fe en encauzar su futuro y, aunque en un principio se muestre callada, demostrará que tiene mucha sabiduría que repartir y muy buenos consejos que dar. Ha estado prácticamente toda su vida dependiendo de su marido para todo pero ha decidido, por fin, tomar las riendas de su futuro.
Casandra es una mujer muy independiente que lleva eso por bandera. Está completamente volcada en su trabajo y ha descuidado por completo la esfera personal, lo que, llegado cierto punto, no le permite sentirse satisfecha con su vida.
Aurora ha sido de mis personajes favoritos y es que ella es una mujer preciosa que no se valora demasiado a sí misma. Entiende el amor como sufrimiento y es por ello que, cuando por fin decide darse una oportunidad con alguien, se meterá de lleno en una relación en la cual ella no significa nada para su pareja, sino simplemente una forma de llevar una vida cómoda pero Aurora cree que amar así es lo correcto y es por ello que se aferrará a la relación.
Gala es, tal vez, la que más carácter tiene de todas ellas y la que menos me ha atrapado con su historia. No lleva demasiado bien el tema de envejecer.
Victoria es la única de las chicas que parece tenerlo todo, pero nada más lejos de la realidad. Todo el mundo ve en ella a una mujer con una vida estable, unos hijos maravillosos y un marido perfecto pero la realidad es muy distinta y ella se siente encarcelada, hasta que alguien aparece en su vida y le hace replantearse su situación personal.

Si algo me ha gustado de este libro es lo mucho que he aprendido con él. Me ha encantado la sabiduría de todos sus personajes y ha sido sensacional ir descubriendo la historia de cada una de las protagonistas e ir creciendo con ellas.

Es un libro de crecimiento personal, en el cual tendremos que pararnos a pensar en muchas cosas de la vida, a examinar si nosotras estamos haciendo las cosas bien o si, por el contrario, estamos cometiendo el mismo error que las protagonistas y simplemente nos acomodamos con lo que tenemos. Agradezco enormemente ese ejercicio de reflexión y es que, si algo me gusta cuando leo un libro, es que me invite a ello.

Esperaba encontrar alguna historia de amor en la trama y lo cierto es que no sucede así. Se trata de mujeres independientes, que por supuesto se dan la oportunidad de amar y de compartir su vida con alguien pero esto será algo totalmente secundario y de lo que prácticamente no formaremos parte ya que la esencia de la historia es únicamente el crecimiento de cada una de las chicas.

No voy a negar que me ha costado engancharme al libro. Además, tal y como os dije antes, no terminaba de encajar con la protagonista y no terminó de atraparme hasta bien alcanzada la mitad de la historia. A partir de ahí empecé a engancharme de verdad y pude cerrar el libro con una muy buena sensación y con la creencia de que he aprendido algo leyéndolo, así que os lo recomiendo un montón.

En definitiva, Mujeres que compran flores es un libro con el que, aunque me ha costado arrancar, he aprendido mucho de unas mujeres que buscan su independencia en todos los aspectos pero para ello deberán liberarse primero de muchos lastres, lo cual me ha permitido crecer a la vez que lo hacen ellas.