Reseña La desaparición de Stephanie Mailer- Joël Dicker

Autor: Joël Dicker
Editorial: Debolsillo
Nº de páginas: 656
Precio: 14´95€
Tomo: Autoconclusivo

La noche del 30 de julio de 1994, la apacible población de Orphea, en la región de los Hamptons, asiste a la gran apertura del festival de teatro. Pero el alcalde se retrasa... Mientras tanto, un hombre recorre las calles vacías buscando a su mujer, hasta hallar su cadáver ante la casa del alcalde. Dentro, toda la familia ha sido asesinada.
Jesse Rosenberg y Derek Scott, dos jóvenes y brillantes policías de Nueva York,resuelven el caso. Pero veinte años más tarde, en la ceremonia de despedida de la policía a Rosenberg, la periodista Stephanie Mailer lo afronta: asegura que Dereck y Jesse se equivocaron de asesino a pesar de que la prueba estaba delante de sus ojos, y afirma poseer información clave. Días después, desaparece.

Opinión personal:

Sé que normalmente la gente se inicia con este autor a través de La verdad sobre el caso Harry Quebert, que fue su primer gran éxito. Yo tenía claro que quería leer algo de Joël Dicker y la verdad es que no me importaba demasiado por cuál de sus libros empezar porque estos dos me llamaban mucho así que decidí empezar por el que hoy os traigo aquí simplemente porque era el único que había en la librería.

Todo da comienzo cuando Jesse Rossenberg va a ser despedido por sus compañeros tras años de servicio como brillante policía. Pese a su juventud, siente que esa etapa ya ha terminado para él pues desea iniciar un nuevo proyecto. Además, puede estar feliz de haber llegado muy lejos en su profesión pues, tanto él como su amigo y compañero Derek Scott fueron condecorados veinte años atrás por la resolución de un brutal crimen que conmocionó a todos los vecinos.

Y será precisamente ese caso el que haga que Jesse se replantee su decisión de abandonar definitivamente la policía pues, Stephanie, una joven y brillante periodista, se pondrá en contacto con él para hacerle saber que tanto él como su compañero se han equivocado en la resolución del caso que tuvo lugar veinte años atrás.

Jesse se tomará el asunto con cierta cautela pero, cuando Stephanie desaparece al poco de proporcionarle esa información, decidirá ponerse a investigar y solicitará para ello la ayuda de su inseparable Derek. Son muchos los cabos sueltos que quedaron del asesinato del alcalde Gordon, su mujer, su hijo y Megan, una deportista que pasaba por allí y Jesse está dispuesto a llegar al fondo del asunto ya que no desea abandonar su cargo sin saber qué ha pasado realmente y, de ser necesario, enmendar su error.

Jesse es un personaje que me ha gustado mucho porque tiene un montón de rasgos interesantes, no solo en el plano policial, sino también en el humano. A la par que vamos avanzando en la investigación con él, también iremos descubriendo algunos aspectos de su vida que a mí al menos me han sorprendido mucho y me han conmocionado. También tengo que decir que por momentos me ha parecido un poco torpe porque creo que se precipitaba demasiado y eso le llevaba a cometer errores pero bueno, ya sabemos que no es un personaje perfecto.

No analizaré más personajes porque, si hay un protagonista claro, es Jesse, que será quien nos acompañe a lo largo de todo el libro. Hay infinidad de personajes y es por ello que no voy a definir a cada uno de ellos y que, si algo abunda en este libro, es el número de figuras que la componen. Debido a esto, me he confundido en algún momento porque, tonta de mí, no descubrí hasta que finalicé el libro que al final aparece una lista con todos los personajes que lo componen y su función. De todos modos, esto tampoco es algo que haya entorpecido en demasía la lectura ya que, aunque haya podido confundirme un poquito con tanto nombre, pronto conseguía ubicarme.

El libro cuenta con distintos capítulos en los que se centra en los diferentes personajes que lo conforman, aunque los de Jesse serán los que ocupen una mayor parte. Va pegando saltos en el tiempo, de forma que viviremos especialmente en 1994, que es cuando se producen los brutales asesinatos, y también en 2014, que es cuando se reabre de nuevo la investigación.

Todavía no entiendo cómo no terminé este libro con dolor de cabeza porque creo que no elaboré más teorías disparatadas a lo largo de mi vida. Sospeché de todos y cada uno de los personajes pero en ningún momento se me pasó por la cabeza que todo pudiese terminar de la forma en que lo hizo. También tengo que decir que yo me obcequé con que el responsable de todo lo sucedido era un personaje concreto y eso me llevó a perderme algunos detalles porque yo no dejaba de buscar pistas que lo incriminaran. Por supuesto, no podía estar más equivocada.

Creo que no he leído libro más enrevesado en toda mi vida pero esto lo digo en el buen sentido de la palabra. Quizás es que estoy acostumbrada a leer thrillers más simples pero me fascinó la manera en que el autor consigue liarlo todo y que, cuando parece que todo se ha resuelto, veas que nada más lejos de la realidad, y vuelta a empezar.

Sabía que este libro iba a gustarme pero me ha fascinado. No sé qué me pasa últimamente que estoy leyendo lento pero no os miento si os digo que me está llevando más tiempo leer un libro de 300 páginas que este que se acerca a las 650 pero es que están sucediendo cosas continuamente, lo que no es demasiado habitual en historias tan extensas y es imposible dejar de leer, por lo que lo terminé mucho antes de lo esperado.

Por lo tanto, tengo clarísimo que voy a repetir con el autor y el siguiente creo que ya será La verdad sobre el caso Harry Quebert. Me ha encantado su pluma, me ha encantado su manera de sacar de donde parece que ya no se puede sacar y su maestría para confundirnos continuamente. No es fácil hacer un thriller de este estilo en el cual el ritmo no decaiga en ningún momento y en el que consigas crear, a la vez, multitud de tramas secundarias.

En definitiva, La desaparición de Stephanie Mailer es una verdadera obra de arte, un libro en el cual todo se retorcerá magistralmente, causando dudas e incertidumbre constantemente en el autor y cuyo ritmo no decae en ningún momento. De mis mejores lecturas del año.